Cata por parejas organizado por Vila Viniteca.

Existe más historia que geografía en una botella de vino. J. Kresman.

Una vez más peregrinamos hasta Barcelona para asistir a un evento organizado por Vila Viniteca. En este caso el concurso de Cata por parejas (y al día siguiente si conseguimos invitaciones al salón de vinos “La música del vi”).

Para el que no lo sepa el plazo de inscripción se abre el 6 de enero y hay plazas para 120 parejas. Como recibieron tantas peticiones y la lista de parejas en lista de espera era tan larga ampliaron el número de parejas participantes a 130. El total de inscripciones se agotó en 9 minutos. Yo estaba allí la noche de Reyes a las doce menos cinco esperando a que abrieran la página, con la tarjeta preparada y tuve suerte.

Es el concurso más divertido en el que he participado y probablemente que exista. La clave es que participas con un amigo. Los concursos por lo general son demasiado largos, algo tediosos y reconozcámoslo , bastante estresantes. Sin embargo, cuando compites con un amigo/a, es muy divertido y desaparece esa sensación de competición un tanto agobiante.

Una de las cosas más destacables es la puntualidad. Las acreditaciones se dan a las 9.15, la presentación es a las 10.00 y el concurso dura desde la 10 .30 hasta las 12.00. Durante esta hora y media a cada pareja se le sirven 7 vinos del mundo. Cada participante dispone de una copa de cada vino para el, por lo que se sirven 260 copas de cada vino, dos por pareja. Todos los vinos vienen en el mismo tipo de copa, todas las copas vienen con un papel con un número que indica el orden en el que ha sido servido y los vinos no han sido decantados. El orden de servicio es: un espumoso, tres vinos blancos (este año), dos tintos y un vino especial que puede ser dulce, de Jerez, encabezado, etc.

Cada pareja dispone de dos sobres. En uno están las hoja, numeradas de 1 al 7, en las que vienen los datos a proporcionar y la puntuación de cada dato. País (1 punto), Zona (1 punto), Denominación de Origen (2 puntos), Variedades (3 puntos), Añada (3 puntos, si se acerca uno mucho y dice la anterior o la posterior recibe 1 punto), Bodega (3 puntos)y Nombre comercial del vino (2 puntos). Cuando más aciertes más puntos tendrás. El segundo sobre contiene 7 hojas en blanco para apuntar las notas de cata y las sensaciones organolépticas y los razonamientos que te han conducido ha inferir que era un vino en particular. Es importante rellenar estas hojas. En caso de empate decidirán quien pasa a la final.

Yo nunca las he rellenado. También así me va.

Cuando sales de la cata, estás convencido de que esta vez si, lo has clavado. Hablas con los demás participantes y les abrumas con tus conocimientos y tus deducciones. El tiempo de espera no es tiempo perdido. Vilaviniteca organiza una degustación de vinos a la que están invitados todos los participantes y público que asiste al evento. Durante las dos horas más o menos que duran las deliberaciones y la corrección de los exámenes todos bebemos más de la cuanta. Sobre las 13.45 volvemos a la majestuosa sala de la Llotja del Mar y contenemos los nervios. La expectación es máxima y la emoción se puede percibir en todos los rostros.

Las diez parejas que más puntos consigan pasan a la gran final. Es dificilísimo, pero muy divertido, y los vinos suelen ser muy representativos de su zona de elaboración y de una gran calidad.

La gran final es casi igual, con 7 vinos para las diez parejas finalistas, pero en vez de 90 minutos solo disponen de una hora. Cuando acaban el jurado corrige las respuestas y después se dan los premios.

Los premios son realmente importantes. 20.000 euros para la pareja ganadora , 7.000 para el 2º y 3.000 para el 3º (todos con un lote de vinos y productos de Riedel)

Los vinos fueron espectaculares, y merece la pena participar por catar una selección de vinos tan interesante (además, la cata a ciega te pone en tu sitio y te hace ver lo difícil que es catar y también pone en su sitio a muchos vinos). De 14.00 hasta 15.30 hay un extraordinario surtido de quesos a disposición de los participantes en el concurso y para el público. Antes del veredicto final, hay un sorteo entre todos los asistentes, concursantes y público, de los (extraordinarios ) vinos de la final.

En fin, un día diferente, lleno de emoción y francamente divertido. La organización, como siempre, rallando la perfección. Se cumplen los horarios, el personal es atento, todo el material necesario está a tu disposición y la selección de bebidas y combinados es excelente.

Enhorabuena a todo el personal de Vila Viniteca. En muy pocos sitios existe la capacidad de organizar un evento de esta magnitud con tanto cuidado por el detalle y tanta eficiencia.

Unos pocos datos para que se den cuenta. Durante el concurso se utilizaron:

• Más de 2000 copas Riedel
• se descorcharon 266 botellas
• 8 empleados de Vila Vinateca desde las 6 de la mañana poniendo el vino a su correcta temperatura, sirviéndolo y velando por las perfectas condiciones de cada vino
• 14 camareros encargados de llevar las copas a los concursantes, replantear la sala para la final y atender a los participantes.
• 240 kilos de queso

Realmente, no creo que se pueda hacer mejor.

Mis felicitaciones a la organización y a todos sus colaboradores, han realizado ustedes un trabajo fantástico. Gracias por dejarnos ser parte de algo tan divertido (y exclusivo).

 Los vinos para pasar a la gran final.

Como ya les he comentado, este año estaba bastante contento. Tengo mucha amistad con mi compañero de cata y seguimos un escrupuloso sistema para no influirnos mutuamente y poder expresar libremente que es lo que nos parece cada vino antes de empezar con la discusión y los razonamientos que nos han llevado a decidir un vino sobre otro. Al final nadie lo cumple (supongo que alguno muy profesional si, pero cuando te emocionas empieza a hablar, y si, haces algo que esta mal, intentas imponer tu criterio). Voy a escribir un post la forma más profesional y efectiva de realizar una cata a ciegas, cuales han de ser los parámetros a destacar y como ciertas características de cada vino te conducen a una u otra región, a una variedad específica, etc. Los lectores escépticos pensarán, “si es tan bueno el sistema porqué no acierta”, lícita pregunta, a la cual no puedo responder. El sistema es bueno, yo no).

1.- Raventós i Blanc Manuel Raventós 2008. Conga del Riu Anoja, Pendes, España. (No es denominación de origen Cava, decidió salirse de la DO).
2.- Valdespino Fino Inocente. DO Jerez-Xérès-Sherry, Cadiz, España.
3.- Bründlmayer Grüner Veltliner Käferberg Reserve 2012. Kamptal, Austria
4.- Château-Grillet 2011. AOC Château Grillet, Rodano Norte, Francia.
5.- Daniel Landi Las Iruelas 2013. VT Castilla y León, España.
6.- Vega Sicilia Valbuena 5º Año 2010. DO Ribera del Duero, Castilla y León, España.
7.- De Muller Rancio Seco. DO Tarragona, Cataluña, España.

Una cosa curiosa. La organización nos pidió que pusiéramos en el sobre el vino que más nos había gustado, para evaluar cual era, desde nuestro punto de vista y sin saber nada sobre ellos, el mejor. El mejor valorado fue el vino número siete,el 30% de los participantes lo votaron, con diferencia el más barato de la cata, unos 7 euros de venta al público en tienda. El más caro fue el Château Grillet de 255 euros.