Marta y Didier. Catando de las barricas de Belondrade​. 1ª parte

«Dios no hizo más que el agua, pero el hombre hizo el vino», Victor Hugo.

 La bodega de Belondrede y Lurton dispone de 30 hectáreas en propiedad distribuidas en 19 parcelas. Toda la uva con la que elaboran el vino procede de viñedos propios. Los rendimientos por hectárea son de unos 5000 kg. Disponen de un total de 150.000 kg. de uva. El marco de plantación se está cambiando y se están plantando más pies por hectárea. La producción es la misma, las viñas dan menos cantidad porque compiten entre ellas pero de más calidad. Lo normal en la zona es de 1100 pies/hc y están plantando 3300 pies/hc.

La parcela más lejana de la bodega está a menos de dos kilómetros.

La diferente orientación de las parcelas no permite madurar todas las uvas al mismo tiempo. Cada parcela se vendimia en su momento óptimo, lo cual da una vendimia muy larga de 2 a 3 semanas. La vendimia es manual. Se recoge en cajas de 15 kg. y se lleva a la bodega donde macera toda la noche con sus hollejos.

Solo existe un depósito de maceración. La cantidad máxima de vino que se puede procesar por día será por tanto de 10.000 kg.

Transcurrida la noche se extrae el mosto y se desfanga. Este mosto se le denomina escurrido.

Mosto de prensa: las pastas que quedan en el depósito se llevan a una prensa neumática en la que el mosto nunca está en contacto con el oxígeno. Durante el llenado se inyecta nieve carbónica para mantener baja la temperatura. Mientras se prensa no se deja entran aire y se inocula nitrógeno. Este vino de prensa va al depósito para desfangar.

En este momento se decide si se van a mezclar los mostos escurridos y de prensa.

De aquí pasan a la nave de barricas. Todo el vino Belondrade y Lurton fermenta en barricas de roble francés. Antes del 2000 usaban roble americano pero lo descartaron. Trabajan principalmente con cuatro toneleros de diferentes lugares y diferentes bosques. Dos de Burdeos y dos de Borgoña. Las barricas son todas de 300 litros en vez de las más normales de 225. Ello no implican que cada año hagan pruebas con otros toneleros y prueben diferentes tostados o incluso añadan otro tipo de madera a las barricas, como poner los laterales de alguna barrica de haya para aumentar la complejidad aromática. Se utilizan hasta 4 o 5 años para no imponer el perfil aromático de la madera al vino.

Cada barrica arranca a fermentar de forma espontánea con las levaduras propias del viñedo. Una vez acabada se les deja con las levaduras y hay un trabajo de batonage (remover las lías para que permanezcan en suspensión y en contacto con el vino) al principio todos los días y posteriormente una vez por semana.

Se realizan muchas catas, pero dos son las importantes y en las que se toman las decisiones:

  • La 1º en enero. Los vinos que no dan los parámetros de calidad requeridos para el Belondrade, porque no tienen suficiente potencia o tienen alguna carencia, se envían de vuelta a los depósitos y con ellos se elabora el 2º vino de la casa, Quinta Apolonia.
    El mejor vino posible solo se puede hacer con los mejores vinos de los que se dispone, esta es la razón por la cual se apartan algunos. Quinta Apolonia es un gran vino, verdejo 100% parcialmente fermentado en barrica. Calificado como vino de la Tierra de Castilla y León.
  • La 2º es en junio, se catan todas las barricas, unas 250, y se organizan por lotes, de 8 a 12 o más, según los años, atendiendo a 4 parámetros.
    • Olfato
    • Largo:acidez
    • Ancho:volumen, alcohol, estructura, cuerpo.
    • Verticalidad: la crianza.

Del assamblage de estos lotes vendrá el futuro Belondrade 2012. Es un producto que no existe todavía ni se sabe como va a ser. Vino en continua evolución y la pretensión de hacer el mejor vino posible. Esa es la filosofía de la bodega. La intención de vinificar unas uvas con el carácter de la tierra y la personalidad del hombre inspirados en la excelencia. Hacer un Vino, el mejor que se pueda con los conocimientos que se posee y la materia prima del campo que les rodea. Las uvas son blancas, el vino es blanco. Pero la intención, y lo repitieron, es hacer un Vino, el mejor que sepan.

Esta filosofía desemboca en la elaboración del vino. Para entender la complejidad del vino hay que entender su elaboración. Es un vino de assamblage, se mezcla procedencia, fermentación y crianza. Se podrían hacer vinos excepcionales por parcela, pero le quitarían una parte al vino principal de la casa. La fermentación y crianza en barricas de diferentes toneleros, de diferentes bosques y diferentes tostados aumenta la complejidad. Las barricas que no responden a los parámetros de calidad para la elaboración de Belondrade se retiran para Quinta Apolonia(hemos hablado de este vino en otro post, uno de los mejores relación calidad-precio del mercado). El misterio final del Belondrade no es más que la paciente mezcla de las pequeñas partes, parcelas vinificadas por separado, barricas diferentes para cada parcela, lotes y ensamblaje final.

Cata de parcelas:

Los vinos  que nos dan a degustar proceden de diferentes barricas de la misma parcela que han extraído esta mañana y mezclado para que entendamos la complejidad de cada parcela. Todos están algo turbios, están sin filtrar y se removieron las lías hace 4 días. No son un producto terminado.

  • Muestra 1: EP21.
    La E significa el vino escurrido, P vino de prensa y 21 el día de septiembre que se vendimió la parcela. Como hemos explicado se vendimia por parcelas. El día 21 le correspondió a la parcela Campo Ventoso. El suelo de esta parcela es de canto y arena. La arena da menos estructura pero más elegancia, esa es la razón por el que se le añade el vino de prensa. La característica aromática principal es la floralidad. Elegante, complejo, frutal. La entrada en boca es directa, buena acidez y amargor final. El recuerdo floral se intensifica. No presenta ninguna arista. Elegante y aromático.
  • Muestra 2: EP 24. Finca el Picón. Suelo arenoso con marco de plantación de 3300 pies/hectárea.
    Aromas vegetales le hacen fresco en nariz. En boca nos sigue dando el matiz vegetal, vainilla e hinojo. Mas potente e intenso.
  • Muestra 3: EP 25. La Cañada. Suelo más calizo.
    Recuerda mucho al verdejo joven. Frutal y con notas de hierva recién cortada tiene una magnífica acidez que recuerda al pomelo. El amargor final es muy agradable y muy largo. El mas estructurado de todos.
  • Muestra 4: E28. Parcela La Bodega. Arcilla y canto. La arcilla da vinos mas potentes, por eso no se mezcla con el de prensa.
    Vamos a catar las barricas de esta finca una a una. Haremos una segunda publicación con nuestras conclusiones.
  • Muestra 5: EP30. Finca Cantarranas. Suelo de canto y arena.
    Perfil aromático floral, me recuerda mucho al primero. Un poco más intenso de sabor. Fruta fresca, acidez muy integrada y  hierba cortada.

Los vinos catados son todos diferentes. El potencial que pueden desarrollar está fuera de mi alcance y no sé como se pueden mezclar. Son magníficos, sin la complejidad del producto final pero con su indudable calidad. Destacaría su equilibrio. Con características distintas, cada uno con una virtud diferente, no saturan, no cansan nuestro paladar.

La muestra nº1 es un vino excepcional, elegante, con un perfume nítido que no satura y una permanencia en boca larga y agradable.

La comida:

En la comida nos pusieron unos vinos excepcionales, franceses y españoles. Tuvimos la suerte de probar el Belondrade 2011, el Quinta Apolonia y por encima de todo un Belondrade de 1996.

Antes de pasar a la cata de este último me gustaría hacer un comentario: Didier Belondrade, el propietario, y Marta Vaquerizo, la enóloga, estuvieron todo el día con nosotros respondiendo a todas nuestras preguntas, compartiendo sus conocimientos, dándonos a probar su trabajo. Amabilidad no define la calidez y el buen trato que nos dispensaron. Decir gracias también se queda corto para transmitir lo que nos hicieron sentir.

La visita estaba programada para 8 personas. Más hace imposible este contacto tan cercano, y procuran evitarlas. Sentados a la mesa hablamos de vino, de biodinámica, de emociones. De la relación afectiva con el viñedo, de los depósitos de hormigón en forma de huevo, de ex mujeres. De lo agradable que es compartir una pasión con alguien que habla tu propio idioma.

Belondrade y Lurton 1996

Precioso color dorado, muy brillante.

Solo servido presenta aromas de reducción bastante intensos. Hay que esperar y airear bien la copa. Según van desapareciendo estos aromas de reducción percibimos aromas que recuerdan a la trufa y a cueva cerrada, con musgo.

Vino complejo. Por complejidad entendemos la aparición y desarrollo de nuevos  aromas en orden secuencial. La calidad vendrá dada sobre todo por la nitidez con que estos aromas sean percibidos si estos son agradables.

Los aromas se despliegan con elegancia y sutileza. Hierbas aromáticas, cera de panal, pera muy madura, casi en almíbar notas a regaliz y avainilladas, todo en un magnífico marco de flores secas.

En boca conserva su elegancia. Ha perdido algo de su vigor pero mantiene una magnífica acidez. Las notas algo dulces no resultan pesadas y deja un ligero posgusto a miel y regaliz. Es largo, con un amargor final menos herbáceo y más floral, con especias dulces tipo canela. Sorprende la facilidad con la que podemos beberlo. Vino  equilibrado, no presenta ninguna arista y el tiempo en botella ha sabido extraer complejidad y finura.

Pocas veces se tiene la suerte de probar una trabajo tan bien elaborado.

Es la visita a una bodega que más me ha gustado. Gracias se queda corto, pero gracias de nuevo.

Terroarista