Parcelarios de Artadi. Hacia la expresión del Terroir.

Estos vinos son el resultado de años de experiencia y sobre todo de la pasión nacida en estos años hacia la viticultura, la fuerza sobrenatural del suelo, el clima y la naturaleza en su conjunto.

Los vinos de parcela, de un único viñedo, de un solo entorno. Reflejan el acosistema y el microclima del que proceden y les aporta su personalidad.

¿Cual es la razón de la existencia de estos vinos de parcela?

Se llega a través del aprendizaje. El trabajo, la dedicación y la observación te conducen a un nuevo tipo de viticultura, de enología , de vino.

El vino siempre ha sido considerado un alimento. Cubría una necesidad alimenticia. El vino se elaboraba de una forma industrial para cubrir esta necesidad. Ahora se cubre otra necesidad, no la fisiológica, sino la emocional.

La experiencia,  hacia 1991, les enseñó que había pagos, pequeños trozos de tierra que daban uvas capaces de producir un vino de más calidad. De esta observación surgió Artadi, Grandes Añadas.

 En el año 2009 sintieron la necesidad de transmitir la personalidad de cada parcela.

 Este ha sido el proceso seguido en Artadi: 

Viticultura industrial → parcelas y añadas → una sola parcela.

Una vez más, la experiencia les ha llevado a una certeza, la grandeza de cultivar un viñedo sin presión química. El viñedo agradece este trato. Dejar que se exprese el viñedo es lo que permite que un vino sea grande. No es un redescubrimiento de una forma de hacer, sino un reencuentro con la naturaleza.

El cultivo ecológico y biodinámico, el respeto a la naturaleza y la identidad de cada viñedo nos conduce a la máxima expresión del terroir.

Todas las cepas se vendimian de una sola vez. Parte del carácter de esas parcelas viene de todas las uvas, perfectamente maduras o no. No se hacen selecciones exhaustivas.

Trabajan con 10 toneleros franceses. Todas las barricas usadas para estos vinos son nuevas, de 1º uso , y de grano fino. La crianza va desde los 10 hasta los 14 meses, dependerá de la añada y las capacidades de cada vino.

Todos hacen la fermentación maloláctica en barrica. El primer año las barricas permanecen en una nave a temperatura controlada, 10-12º. Posteriormente se pasan a otra nave a una temperatura de unos 13º.

  •  VADEGINES 2010. 

7 hectareas de viñedo de 30 años. El suelo es arcillo calcáreo.La peculiaridad de este vino esta ligada a su orientación. Orientación a mediodía a media ladera (expuesto al sol de la mañana).

Elegante , redondo, floral, fruta roja y negra. Muy mentolado, es su magnífica acidez el elemento que aporta el equilibrio  y la frescura. Magnífico. 

  • LA POZA 2010. 

Este viñedo tiene exposición al sol de la tarde. Al recibir mas insolación el tipo de fruta es mas madura . 

Los aromas son más compotados, con fruta madura y en sazón. Más mineral, nos apunta tinta china y algún tipo de hierba de monte.

Profundo, mineral, el tacto es fantástico, siempre presente el vino pero sin cansar. Largo, te invita a seguir bebiendo. Redondo, equilibrado, complejo. Una delicia. 

  • EL CARRETIL 2010. 

De una sutilidad y elegancia sublimes, desde el primer momento te das cuenta que estas delante de uno de los más grandes vinos. Mineral, tinta china y piedra mojada, fruta madura, especias. Complejo pero nítido, no se esconde. Un perfume de flores abraza los aromas más escondidos.

Elegante, fresco, sútil y a la vez vigoroso, profundo, presente en toda la boca. El tacto es perfecto, con un tanino danzarín y difícil de localizar que deja espacios en la boca para seguir degustando. Largo, placentero, insinuante, emociona porque oculta algo. No es posible entenderlo en un par de tragos. Fuera de categoría.

Enorme, su potencial de envejecimiento está por ver, no se puede evaluar en este momento. Ofrecerá lo mejor de si más adelante. 

  • EL PISÓN 2010

Viñedo plantado por el abuelo en 1945 demuestra una vez más la importancia de la relación afectiva con el viñedo. Juan Carlos va todas la semanas a ver el viñedo, habla con él, le transmite su afecto y cariño preguntándole como está. El viñedo siente este afecto y lo devuelve. Juan Carlos asegura que lo siente de corazón, que es así.

Este viñedo es un misterio. Demasiado profundo, unos 3.5 metros, y limoso calcáreo parece demasiado fértil. Sin embargo, este suelo y su singular regulación hídrica evita el efecto añada. Drena bien los años de lluvia, almacena agua los años de sequía. 

Es complicado tratar de describir lo que este vino provoca. Los aromas son sútiles, pero nítidos. Complejo no complicado. Ligero pero no débil. Aromas mentolados nos trasladan a un pequeño trozo de tierra, mineral, profundo.

El tacto es su mayor virtud, elegante, redondo. Te recuerda otros tiempos, te invita a la reflexión. Placer líquido.

 

La producción de estos vinos es de 3000, 4000 botellas, todas vendidas en avanzada.

Su potencial de envejecimiento se desconoce, pero mínimo, de 15 a 25 años.

Existen tres grandes pilares sobre los que se asientan todos los grandes vinos: 

  • aromáticamente potentes.
  • complejidad, que tengan cosas que decir.
  • capacidad de envejecer bien.

Y esta es la pregunta que mas fácil me parece responder: ¿momento óptimo de consumo? SIEMPRE.

Terroarista