Un plato un vino

Si aceptamos que las relaciones siempre son de uno a uno y que cada participante en dicha relación presenta unas características propias y una potencialidad para desarrollarlas en su totalidad la PAREJA PERFECTA sería aquella que permita la expresión de todas estas características individuales en su totalidad. Podría estar hablando de amor o de la vida, pero en realidad hablo de VINO.

 

No voy a describir cada vino, solo la relación que se estableció entre cada vino y cada plato.

Viña de Martín Os Pasás 2010 con Mejillones en escabeche:

Vino blanco sin crianza de D.O. Ribeiro de variedades treixadura, lado, albariño y torrontés.

El vinagre, siempre tan agrio, hace desaparecer el vino y lo vuelve plano y sin recorrido.

MALA PAREJA.

 

Leirana 2010 con buey de mar cocido:

Bodega Forjas del Salnés, vino blanco sin crianza de la D.O. Rías Baixas de la variedad albariño.

La salinidad y sabor a mar del buey hace más opulento y engrandece al vino, que con su rica acidez nos prepara para seguir comiendo.

BUENA PAREJA.

 

Quinta Apolonia 2010 con tartar de atún rojo y aguacate:

Bodega Belondrade y Lurton, vino de la tierra de Castilla y León, blanco con crianza en barrica de variedad verdejo.

El elegante y profundo sabor del atún con la cremosidad vegetal del aguacate se cosigue un plato de texturas y sabores.

La extraordinaria  variedad verdejo con sus matices de hierba cortada y el ligero aporte tánico de las barricas crece con el plato y transforma este gran vino en más largo y profundo, agrandando sus cualidades. El plato se ve reforzado tanto en la sutileza del sabor del atún como del complemento más fresco del aguacate.

ACIERTO PLENO.

 

Guimaro 2010 con tostas de jamón ibérico:

Bodega Adagas Guimaro, tinto joven de la variedad mencia. D.O. Ribeira Sacra.

Las propiedades del jamón con su aporte salino y su suave grasa acompaña bien a todo tipo de vinos. La juventud de la mencia de este vino,  vigorosa y fresca, ayuda a disfrutar del jamón.

UNA PAREJA DE FELICIDAD DE BAJA INTENSIDAD.

 

12 Volts 2010 con morcilla y calabaza:

Bodega 4 kilos vinícola, vino de la tierra de Mallorca, de las variedades merlot, syrah, callet y cabernet souvignon.

La calabaza da un sabor dulce que vuelve más amargo el vino y pierde su complejidad mineral.

FALLO DE LOS GORDOS.

 

Clos Dominic vinyes baixes 2004 con cordero asado:

Bodega Celler F. Castillo de la D.O. ca. Priorat de variedades 60% Merlot, 20 % Cabernet, 20% restante Garnacha, Carinyena y Picapoll Tinta. Tinto con crianza en madera.

Excepcional vino, elegante y seductor, al que e cordero no aporta nada. El cordero es realmente difícil de maridar,  y aunque el vino no molesta, no se produce un desarrollo adecuado de las cualidades ni del plato ni del vino.

SE SOPORTAN CON UN CIERTO GRADO DE INFELICIDAD.

 

Terroarista