Decálogo

TERROARISTA:

 Persona que :
  1. Acepta como máximo distintivo de calidad de un vino la expresión del terroir.
  2. Está siempre a la busca de la singularidad.
  3. Es infiel, siempre está probando cosas nuevas.
  4. Intenta formarse un criterio propio. Cree que la única forma de conseguirlo es probando mucho y escuchando a los que saben.
  5. Tiene sus propias ideas, que  generalmente no coinciden con las comúnmente aceptadas por la mayoría.
  6. Le gusta compartir sus opiniones y escuchar las de los demás. Hablar de vinos le parece un gran entretenimiento.
  7. Piensa que los vinos se inventaron para ser disfrutados. Es cierto que  cuanto más se sabe más se disfruta, pero este saber está dirigido al placer de los sentidos, no para impresionar a los amigos o al jefe.
  8. Está un poco harto de las descripciones de la cata convencional. No solo no ayuda a disfrutar del vino, sino que con su lenguaje hermético y pretendidamente profesional disuade a los que se quieren iniciar.
  9. Está realmente harto de los que presumen de sus conocimientos y se pavonean exhibiendo sus habilidades y supuestos dones.
  10. Está convencido que existen vinos no muy caros que excitan los sentidos, y los busca y los comparte.

Piense lo siguiente, todo lo que podamos enseñarle, todo lo que podamos compartir sobre vinos, le va a dar placer desde hoy hasta el último de sus días, en cada comida, en cada compromiso, en cada reunión, en su tiempo de ocio.

¿Hay alguien que le pueda prometer lo mismo?

Gracias por estar con nosotros.

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