Una historia sin final feliz.

Éramos una irlandesa, un inglés y un español. Bajo el inquietante nombre de Dr M reconocemos a la irlandesa, el español no es otro que el humilde escritor de este blog y en cuanto al último personaje…

Equipaje de "mano"  con todo lo imprescindible.
Equipaje de «mano» con todo lo imprescindible.

Permítanme presentarles a Chris. Es un inglés algo mayor de 50 años, antiguo trabajador social, alegre y bebedor. Viene conduciendo desde el sur de Inglaterra para pasar unos días con nosotros, cruzar los Alpes, ingerir todos los productos alcohólicos locales (o no) y reírse con Dr M en un idioma absolutamente incomprensible que algunos llaman “british”. Su equipaje consta de ocho grandes bolsas de la compra repletas hasta los topes de lo que el denomina su “stuff”, -todo es absolutamente imprescindible- me responde mirándome perplejo cuando le pregunto sobre su contenido. El equipaje incluye cuatro pares de zapatos de montaña, una chanclas (ellos las llaman flip-flop), dos cazos de cocina para hacer té, una “cattle” (jarra para calentar agua para el té), cubertería, cuchillos de sierra, ropa variada, tres termos (para el té), seis botellas de agua escocesa (para el té), comida suficiente para un grupo de 6 personas por un tiempo indefinido, un camping gas con el cual cocina dentro de las habitaciones de los hoteles, una tabla para cortar el queso, una bandeja para servir el queso, un galón de sidra, cognac, varios tipos de linternas y, literalmente, unas cien cosas más no imprescindibles (según mi criterio). Sé que ustedes piensan que exagero para dar una nota cómica, aporto fotos. Siempre tiene calor y siempre está quejándose mientras hace grandes gestes para bajar su temperatura corporal. Parece un dato poco relevante a no ser que tengas que compartir algún tipo de habitáculo con él. En los Alpes puso el aire acondicionado para desempañar los cristales del coche consiguiendo la hazaña de bajar la temperatura de dentro del vehículo por debajo de la exterior, todo nevado.

Después de cocinar la cena en la habitación del hotel y de preparar el té, en el ambiente íntimo de la barriga llena y la taza humeante Dr M sugirió;

DrM- Chis, por que no le cuentas a Terroarista la historia de Stephen, es muy graciosa.

Chris cocinando en chanclas en la habitación del hotel un "sets".
Chris cocinando en chanclas en la habitación del hotel un «sets».

 

Esta es la historia, algo ordenada y sin las impenetrables expresiones británicas.

Chis- Había preparado una deliciosa cena y tenía cuatro invitados. Dos amigos, Stephen y su mujer Eleonor (los nombres son auténticos; Chris me invito a cambiarlos pero luego le convencí de que nadie en Inglaterra iba a leer el post y aceptó). Stephen es un curioso personaje. Era un compañero de trabajo, también trabajador social…

T- Un trabajador social, ¿cuida a personas sin recursos o a personas con problemas mentales?.

Dr M- A los dos. Por lo general estos dos grupos de personas se solapan unos sobre otro. La mayor causa de enfermedad mental es la pobreza, normalmente generada por la desigualdad. Yo también le conozco, solíamos quedar los miércoles después del trabajo a beber unas compas. ¿Te acuerdas cuando no lo admitieron el partido Tory (conservador)?.

Chris- Stephen fue un visionario. Algo racista y clasista, lleva defendiendo el brexit desde hace 20 años. Quería ser PM (miembro del parlamento) pero no le quisieron. Cuando no fue “rejected” (apartado) del partido conservador lo intento con los independientes cuyo único argumento político es ser anti todo, especialmente anti europeos y anti inmigración. Tampoco fue admitido.

Dr M- Es una persona muy educada y muy graciosa, un buen colega para pasar un buen rato.

Chris-Volvamos a la noche de la cena. Llegan todos los invitados cada uno con su obsequio, casi todos vino. Stephen también trajo una botella de vino, un vino de esos caros que tanto le gustan. Todos pusieron el vino encima de la mesa excepto él. Lo colocó cuidadosamente en un lado de la mesa, donde nadie podía llegar pues lo impedía su inmensa envergadura (esta bastante gordo). Empezamos a comer. Stephen comía rápido y se servía exclusivamente de su vino, que no compartió con nadie, incluida su mujer. Sirviéndose de todos los platos comía ávidamente mientras bebía su vino sin mirar a nadie, concentrado en ingerir sin pausa.

De repente empezó a toser, al principio levemente pero cada vez más alto, mirando a la mesa, muy desagradable. Todos dejamos de comer y nos quedamos mirándole mientras cambiaba de color. Su cara adquirió un “funny color” (maravillosa expresión inexistente en nuestro idioma: color gracioso o extraño). Miré a su mujer algo asustado y ella me miró, se encogió de hombros y no mostró ninguna expresión. Stephen no podía respirar, literalmente se estaba muriendo. Reaccione instintivamente y le di un buen puñetazo en la espalda y acto seguido otro más fuerte. Un vómito color púrpura cayo sobre la mesa. Gracias a Dios Stephen se giró y la mayoría del vómito cayo en un lateral de la mesa. Todos nos levantamos a recoger, limpiar y atenderle. En unos minutos cambiamos la mesa, pusimos platos limpios e intentamos seguir comiendo. Su mujer no preguntó ni una sola vez a Stephen sobre su estado, no parecía interesarle mucho. Sentados a la mesa, con el susto todavía en el cuerpo y sin poder comer, miro a Stephen: estaba echándose la comida que quedaba y se la comía sin levantar la vista. Cuando vació su botella de vino, no se como había conseguido guardarla en un lugar seguro, nos pregunto extrañado por qué no seguíamos comiendo.

T-¡Es increíble”!. ¿Y no te dijo nada más?.

Chirs- Al final de la cena se quejo de dolor de espalda. Según su opinión le había golpeado demasiado fuerte. Después de la cena y los destilados se fue como si nada hubiera pasado.

Los lectores que hayan llegado hasta este momento del relato estarán como estaba yo, consumido por la única pregunta importante que casi desde el principio de la historia rondaba mi cabeza. Bueno, ya les dije que no había final feliz.

T-¿Cuál era el vino, el vino que llevo Stephen?

Chris-Lamentablemente, no me acuerdo.

 

Dr M y Chris buscando fantasmas en un cementerio, los Alpes.
Dr M y Chris buscando fantasmas en un cementerio, los Alpes.