Cata vertical de Spiga, de bodegas O. Fournier. Cata dirigida por Natalia Ortega.

 

La bodega se encuentra en Berlangas de Roa. La propiedad fue adquirida por la familia en el año 2002. De las 105 hectáreas que conforman la propiedad 60 corresponden a viñedo en la Finca El Pinar. El resto corresponde a fincas de regadío y un bosque con pinos autóctonos de mas de 180 años de edad.

Dentro de los suelos que podemos encontrar en Finca El Pinar predomina el canto rodado proveniente de aluviones del río Duero ya que esta propiedad linda con el río en más de 4 Km. Existen zonas arenosas principalmente en la zona oeste. A su vez, podemos encontrar una capa arcillosa a unos 60-100 cm de profundidad que permite la retención de humedad. El suelo en general es muy pobre en materia orgánica y con un excelente drenaje. El canto rodado aporta adicionalmente mejoras en la maduración de la uva mediante la refracción del calor solar que recibe durante el día y que desprende durante la noche.

Los rendimientos por hectárea nunca superan los 3000 kg/hc. Esto se debe principalmente a la edad de los viñedos, la pobreza del suelo, los marcos de plantación y la rigurosa poda a la que se somete el viñedo.

La cosecha es manual, en cajas de 18 kg. con una doble selección, primero en la viña y luego en mesa de selección. Maceración en frío con nieve carbónica para la mejor extracción de los compuestos fenólicos. La fermentación alcohólica se realiza en tanques de acero y cubas de madera de roble. La fermentación maloláctica la hace en barrica de roble. El vino permanece en barricas de roble, mayoritariamente francés, nuevas y de un uso durante unos 13 meses. En botella permanece un mínimo de 8 meses. Ningún vino de la bodega viene con contraetiqueta de crianza, reserva, etc. para permitir más flexibilidad al elaborador a la hora de intentar alcanzar un vino de máxima calidad.

Spiga: 100% tempranillo de la Finca El Pinar.

Spiga 2007:

Color vivo y brillante.
Aroma un tanto vegetal, muy fresco, con algo de fruta roja y especias. No acaba de expresar todo su potencial y resulta algo corto.
Entrada directa, buena acidez. Fruta roja y especias con un final un poco vegetal. Con cierta astringencia, nos deja una sensación secante. El posgusto no es muy largo.
Algo inexpresivo.

Spiga 2006:

Color vivo y brillante.
Algo cerrado, necesita ser aireado para que empiece a expresarse. Complejo, nos aporta notas minerales, algo vegetal de monte, fruta negra madura, especies dulces y regaliz. Aromas nítidos y de gran calidad.
La entrada es potente, con mucho cuerpo, elegante gracias a la magnífica acidez, con fruta madura y toques mentolados. Los taninos están maduros  y le aportan un tacto sedoso. Posgusto largo. Muy equlibrado, es un vino redondo en su momento óptimo de consumo.

Spiga 2005:

 Color vivo y brillante.
Aroma más intenso, con notas florales, fruta negra, regaliz  y canela. Los aromas, más intensos y maduros, no tienen la gracia del anterior, siendo profundos y de calidad.
En boca es intenso, con gran cuerpo, buena acidez y posgusto medio. Los sabores son de fruta más madura. Equilibrado y redondo, no tiene la elegancia del 2006.

 Spiga 2004:

Color vivo y brillante. Los cuatro vinos presentan la misma intensidad de capa y un color muy parecido.
Aromas que se despliegan con elegancia. Fruta más fresca, notas de lavanda, especias y mentolados.
Entrada con presencia pero ligero y floral, fruta fresca, mentolados, especias. Largo posgusto de regaliz, chocolate y cerezas. Elegante, redondo, equilibrado, con un tacto sútil y unos taninos muy agradables. 

Spiga 2003:

El color esta un poco mas caído, con el ribete tirando a color teja. Limpio y brillante.
Algo cerrado, todos los aromas son de mucha madurez. Necesita tiempo. Difícil de describir. Pero sin duda más corto y no tan nítido.
En boca es potente, pero bien integrado. Mantiene un cierto frescor, la fruta es madura y algo corto. Los taninos están presentes pero son muy agradables. El vino está muy equilibrado y resulta fácil de beber e incluso es bastante elegante.

Spiga 2002:

Muy cerrado, parece casi herbáceo. Poco expresivo, resulta bastante vegetal y con fruta negra tipo ciruela.
En boca el vino está entero, muy fresco, con una punta de acidez y un final vegetal. Los taninos son un poco secantes. Algo inexpresivo y quizá un poco descompensado.

Conclusiones:

Las añadas que han aguantado mejor el paso del tiempo y que incluso han mejorado con el paso de los años son 2004 y 2006. Más elegante el 2004 y más intenso el 2006. El 2007 fue una añada difícil y se nota en casi todos los vinos. La añada 2002 fue la primera que vinificaron y fue una añada muy complicada, aun así, el resultado es bastante digno. La añada 2003, la de la canícula, ha envejecido bien y es sorprendente lo fresco que resulta. La añada 2005, calificada de extraordinaria, está muy bien, fue el 3º vino que mas nos gustó. Sin embargo, no parece que haya envejecido tan bien como 2004 y 2006.

Felicitar y agradecer a Natalia la posibilidad de hacer una cata vertical tan completa. No es habitual tener la posibilidad de probar todos las añadas vinificadas de un mismo vino, menos de una calidad tan extraordinaria como es el Spiga de bodegas O.Fournier.

Terroarista